Argentina-Bolivia: Experto chileno opina que la política exterior no puede estar sujeta a un partido
El experto chileno calificó la actitud de Morales como un “abuso de confianza” hacia el gobierno del vecino país. “Los exiliados deben ser respetuosos de la política exterior del país que los asila. Si no lo hacen pueden crearle problemas con otros gobiernos. En tal caso, la máxima responsabilidad corresponde al exiliado, quién incurriría en un flagrante abuso de confianza”, complementó.
“La política exterior de un país democrático debe ser una política de Estado y nunca de partido o de ideología. Esto si se quiere fortalecer la paz, el comercio y la amistad entre los pueblos y la colaboración mutua”, señaló Rodríguez.
Luego de la renuncia del expresidente boliviano Evo Morales y la asunción de Alberto Fernández a la Presidencia argentina, las relaciones entre ambos países se deterioró. El mandatario y personeros de su gobierno expresaron en varias oportunidades su respaldo al exgobernante de Bolivia, al cual le dieron refugio.
Morales en territorio argentino continuó con su actividad política, se pronuncia de manera seguida mediante sus redes sociales. Además antes de ser nombrado jefe de campaña del Movimiento al Socialismo (MAS) hizo una aparición pública y pronunciamiento para su militancia en el vecino país.
Ante esto, el gobierno boliviano envió una queja porque Evo transgrede lo establecido en el Tratado de Montevideo, norma que prohíbe al asilado o refugiado hacer pronunciamiento y actividades de carácter político. Argentina respondió que no impedirán las acciones del expresidente de Bolivia, puesto que ello es cuartar su “derecho a la libertad de expresión”.
El experto chileno calificó la actitud de Morales como un “abuso de confianza” hacia el gobierno del vecino país. “Los exiliados deben ser respetuosos de la política exterior del país que los asila. Si no lo hacen pueden crearle problemas con otros gobiernos. En tal caso, la máxima responsabilidad corresponde al exiliado, quién incurriría en un flagrante abuso de confianza”, complementó.
Canciller boliviana denuncia injerencia
La canciller de Bolivia, Karen Longaric, ayer en el programa Conclusiones de CNN, denunció tres hechos claros de injerencia del gobierno argentino sobre la política interna del país. La primera, cuando ministra de las Mujeres, Géneros y Diversidad de la Nación Argentina, Elizabeth Gómez, junto al miembros del Grupo de Puebla, firmó una carta donde se acusa falsamente al gobierno de Boliviano no querer realizar las elecciones.
El segundo, es la distorsión que hizo la Cancillería del vecino país sobre el informe del alto comisionado de la Naciones Unidas (NNUU), sobre presuntas violaciones a derechos humanos que se hubieran dado en Bolivia. El tercero, hace referencia al apoyo que le brindó a Morales el subsecretario de Obras Públicas, Edgardo Depetri.
Debido a estos hechos, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Bolivia presentó una queja contra el gobierno argentino por “grave intromisión” ante la Organización de Estado Americanos (OEA) y la Organización de Naciones Unidas (ONU).
“El gobierno de los señores Fernández, cuando rechazan al gobierno de la señora Áñez, indicando que es un gobierno golpista, están incurriendo en una grave injerencia, más aún cuando este gobierno de la señora Jeanine Áñez ha sido forjado pacíficamente por el pueblo boliviano”, complementó Longaric.
Asimismo, la Canciller resaltó que la relación entre Bolivia y Argentina es importante, puesto que en esa nación residen aproximadamente 450.000 connacionales, los cuales necesitan de la tutela de la administración gubernamental de su país de origen.
“Es importante la presencia de las embajadas y consulados. Imagínese los que sería para nuestros compatriotas la ausencia de tutela consular y diplomática en Argentina, más aún cuando está allá un Evo Morales arrojándose un liderazgo que ya no tiene, porque no tiene ética ni moral para tener ese liderazgo”, añadió.
Por último, la ministra de Relaciones Exteriores boliviana dijo que se teme que los comicios generales, debido a la intromisión del gobierno de Fernández, no se realice de manera transparente. Al mismo tiempo cuestionó la actitud que se tomó en contra de Bolivia, por su afinidad política.
“La actitud displicente de los señores Fernández, no es solamente con el gobierno boliviano, sino con los partidos de oposición de su país y con la misma sociedad argentina; displicencia e irrespeto total. Están acogiendo en su territorio a una persona que tiene una conducta reñida con la ley, a una persona que ha cometido delitos comunes y al que se lo acusa de haber cometido el delito de estupro”, concluyó.