Pablo Peralta M. / La Paz
Salvando excepciones, el rasgo que está caracterizando a la campaña es el de los ataques y no el de la difusión de propuestas electorales, coinciden analistas políticos. Pero lo más curioso que apuntan los especialistas es que la disputa tiene su epicentro en el bando contrario al partido azul.
Aquella tendencia alcanzó su máxima expresión con la reciente polémica en la que se enfrascaron los candidatos a la presidencia respecto a quién “frenó” al Movimiento Al Socialismo (MAS).
Todo comenzó cuando la presidenta Jeanine Añez, candidata de Juntos, tuiteó: “Frenamos al MAS en dos oportunidades y lo hemos hecho con la ley en la mano, sin violencia y sin enfrentamientos”. Carlos Mesa, postulante de Comunidad Ciudadana, replicó: “Quien frenó al MAS, le paró el carro se llama Carlos Mesa y CC a través del voto popular”.
El candidato Fernando Camacho, de Creemos, sostuvo: “Buscando votos, Carlos Mesa tuerce los hechos y se camufla como luchador contra la dictadura de Evo Morales”. En tanto que Jorge Tuto Quiroga, postulante de Libre 21, dijo: “Ningún político expulsó a Evo. Fue el pueblo de Bolivia”.
¿Por qué se da la inclinación al ataque, en desmedro de la difusión de propuestas? “Hay un voto altísimo que es el antimasista. El factor que une a los electores de ese bando es que no quieren que el MAS vuelva a ser gobierno. Entonces, en esa disputa están enfrascados los principales partidos políticos que están en el bando contrario al MAS”, explicó el analista Romano Paz a Página Siete.
El especialista manifestó que uno de los factores que explican aquello es el escenario político, que es “altísimamente polarizado”. “Esto lo venimos heredando desde que el MAS estaba en el poder. Hoy por hoy, en el proceso electoral, los frentes se están disputando el voto y por eso es que tratan de generar una cierta polarización con los diferentes actores, pero aquello se percibe sobre todo entre los que están compitiendo, de alguna manera, por el mismo ‘mercado electoral’”.
El analista político José María Paz indicó a este rotativo que, a diferencia de la elección pasada, hay varios candidatos que ahora se “disputan más o menos el mismo electorado”.
“Se está tratando de posicionar la candidatura que pudiera ser más fuerte respecto al MAS, partido que hasta ahora sigue apareciendo en las encuestas como el que podría tener la primera mayoría en la primera vuelta. Entonces, pareciera que se ha dado una competencia en ese sentido, de ataques y demás, para tratar de posicionar al que pueda ganarle al MAS en el balotaje”, explicó.
No obstante, José María Paz subrayó que ésa “es una estrategia un poco extraña, por decir lo menos”. “Si uno piensa, en realidad lo que deberían estar haciendo los opositores al MAS es arrastrarlo a un segundo lugar, o incluso a un tercero, pero lo que en realidad están haciendo es pelearse por quién puede ser el mejor segundo, y eso es realmente lamentable”, dijo.
Para el analista político es preocupante que no se le esté dando el sitial que merece a la difusión de propuestas, dado a la situación que vive el país. “Las propuestas hoy son más importantes, porque la situación ha cambiado drásticamente debido a la pandemia. Hay muchas preocupaciones en lo referente a la salud, a la economía y también en la educación”, sostuvo.