Un grupo de militares en servicio pasivo se presentó en el Consulado de Argentina, en Santa Cruz, y exigió que la nación vecina, presidida por Alberto Fernández, no le dé refugio al expresidente Evo Morales.
El exmandatario y líder del Movimiento Al Socialismo (MAS) se encuentra allí desde diciembre, luego de haber presentado su renuncia a la silla presidencial.
El coronel Jorge Santiesteban, en representación del grupo pasivo, refirió que el asilo político a Morales debe ser quitado “por todos los delitos que ha cometido”, de modo que regrese a Bolivia y “rinda cuentas”.
La Justicia emitió varias órdenes de aprehensión contra Evo, para que comparezca en distintos procesos por acusaciones de delitos como terrorismo y sedición.
El coronel también le “recordó” a la presidenta Jeanine Áñez que como jefa de Estado es “capitán general de las Fuerzas Armadas” y que actúe para acabar con los bloqueos que sufre el país desde hace 11 días.
Distintos sectores sociales reclaman que se mantenga la fecha inicialmente prevista, el 6 de septiembre, para las elecciones generales, en vez de posponerlas al 18 de octubre, como estableció el Tribunal Supremo Electoral debido a la pandemia de la COVID-19. También exigen que Áñez renuncie a su candidatura.
La Fiscalía admitió una serie de denuncias contra Morales, una de ellas, por acusaciones que incluyen el delito de genocidio, impulsada por el Gobierno interino a raíz de estas movilizaciones, de las que acusa al expresidente de estar detrás para promover bloqueos en carreteras que obstaculizan el transporte de insumos médicos y principalmente oxígeno.
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